EL GRAN BAZAR DE ESTAMBUL

Cualquiera que haya estado en la ciudad alguna vez sabe con certeza que este majestuoso laberinto de edificios alberga miles de tiendas que venden de todo, desde textiles hasta antigüedades, el Gran Bazar de Estambul en 2022, recibió 40 millones de visitantes.
Las visitas al Gran Bazar han aumentado casi un 56%, de 25,5 millones en 2021 a unos 40 millones en 2022. Según esta cifra, para 2022 una media de 100.000 personas visitarán este peculiar centro comercial todos los días. La historia del Gran Bazar se originó a mediados del siglo XV.
En el marco del sistema básico de la era otomana, que cubría casi toda la vida socioeconómica y cultural, se construyeron estructuras como bazares cerca de los lugares religiosos y otras estructuras de carácter social y caritativo para satisfacer necesidades como los honorarios religiosos, mantenimiento y reparación.
Los cimientos del Gran Bazar, uno de los hitos más importantes de la ciudad, se establecieron en 1461 con las estructuras erigidas por el sultán Fatih Mehmet para aportar ingresos a Santa Sofía. El bazar, que con el tiempo se convirtió en el centro comercial más importante de la región, empezó a servir como un importante centro financiero, donde se comercializaban joyas y metales preciosos de todo el mundo.
Definido no solo como el más antiguo, sino como el mayor centro comercial del mundo, el Gran Bazar ha sido remodelado en varias ocasiones a cargo de famosos arquitectos, incluido el arquitecto Sarkis Balyan. Histórica y culturalmente importante, Kapalıçarşı, su nombre en turco, ocupa un lugar destacado en la literatura, los relatos de viajes y el arte, y sigue llamando la atención por ser uno de los bazares históricos más visitados del mundo.
En la sección llamada han (posada),
donde se encuentran los artesanos especializados en los oficios del
Bazar, hay alrededor de 1.200 puestos de trabajo. El Gran Bazar abre
de 8.30 a 19.30 en verano y de 8.30 a 19.00 en invierno.
En
el histórico Gran Bazar, que tras 500 años de actividad ahora
alberga unos 2.500 lugares de trabajo, se pueden encontrar
innumerables productos: desde alfombras a bolsos, desde productos
textiles a joyas de oro y plata, y desde antigüedades a azulejos.
Además
de las tiendas, adentrarse por las sinuosas calles y pasadizos del
Gran Bazar lleva a toparse con numerosos cafés y restaurantes.